Ángela Aguilar asegura que sus abuelos la cuidan desde el mundo de los muertos, se le aparecen en forma de animales

No resulta una sorpresa para nadie el saber que Ángela Aguilar viene de una dinastía plagada de talento y amor por la música, así como por los animales. Por ello, a lo largo de su carrera ha puesto en alto el nombre de sus ancestros de distintas maneras, siendo «Nadie se va como llegó» su más reciente material, en donde además de recordar sus raíces, también incursionó en nuevos sonidos que demuestran su madurez profesional.

Como parte de una gira promocional de medios, la intérprete de «El Equivocado» ha participado en varias entrevistas en donde además de hablar sobre este material, también abrió su corazón y compartió con el público algunas vivencias personales que la atraviesan profundamente. Fue precisamente en un encuentro con Mariano Osorio, que la menor de la dinastía Aguilar recordó a sus abuelos, los legendarios artistas Flor Silvestre y Antonio Aguilar.

Flor Silvestre y Antonio Aguilar son dos iconos inmortales de la música mexicana, con carreras que abarcaron décadas y que influyeron en múltiples generaciones. Su impacto cultural es analizado por medios internacionales, como Billboard, que en una reseña sobre la dinastía Aguilar destacó cómo la familia supo preservar y renovar las tradiciones del mariachi y la música ranchera con éxito en el siglo XXI.

Fuente: El Heraldo