Grupos de seguidores del ex presidente de Bolivia Evo Morales (2006-2019) anunciaron este jueves que reforzarán su seguridad tras la detención del exmandatario Luis Arce (2020-2025), investigado por presunta corrupción en el manejo de un fondo estatal para proyectos indígenas cuando fue ministro de Economía.
El exsenador y dirigente cocalero Leonardo Loza dijo a los medios que la vigilia que realizan los seguidores de Morales en la zona central del Trópico de Cochabamba «continúa» y «se refuerza para cuidar» al expresidente.
Según Loza, que es afín a Morales, el Gobierno de Rodrigo Paz, «en su desesperación, preocupación» por su «mal inicio» de Gobierno, «se va a atrever a hacer una intervención en el Trópico supuestamente para detener a Evo Morales» dentro de las investigaciones por los presuntos malos manejos en el Fondo Indígena.
“Sentimos que con el Gobierno de Paz se viene una cacería de los dirigentes, particularmente de campesinos. Por supuesto, los que tienen responsabilidades tienen que pagar ante la Justicia, no nos oponemos, tiene que haber una investigación profunda en cualquier denuncia”, señaló.
El anuncio de los afines a Morales fue realizado un día después de la detención de Arce, quien es investigado dentro de un caso de supuestos malos manejos en el llamado Fondo de Desarrollo Indígena Originario Campesino y Agropecuario (Fondioc), cuando era ministro de Economía de Morales.
Arce es investigado por los supuestos delitos de incumplimiento de deberes y conducta antieconómica, porque en su condición de ministro de Economía «en las gestiones 2009-2010 y para adelante ha hecho los desembolsos» de recursos del citado fondo para proyectos que «nunca han tenido finalización», según el fiscal que lleva el caso, Miguel Cardozo.
Cardozo informó este jueves que «no se descarta la posibilidad de que se pueda llamar a declarar al señor Evo Morales, ya que él era la máxima autoridad» en ese entonces.
El exmandatario y líder cocalero no se ha pronunciado hasta el momento sobre la detención de Arce, ni por el caso de desfalco en el Fondo Indígena que volvió a la agenda pública la semana pasada, con la detención de una ex diputada del Movimiento al Socialismo (MAS), el partido de Arce y del que Morales formó parte.
Morales permanece en el Trópico de Cochabamba, su bastión político y sindical, desde octubre de 2024, después de que la Fiscalía le abriera un proceso penal por trata agravada de personas, acusado de haber tenido una relación con una menor de edad con quien supuestamente tuvo un hijo, cuando ejercía sus funciones como mandatario.
Desde entonces, sus seguidores mantienen vigilias e incluso cavaron zanjas en el lugar donde está el exgobernante para evitar su captura, que sigue vigente pero que la Policía aún no la ejecuta.
Por su parte, Arce culminó el pasado 8 de noviembre una gestión presidencial que estuvo marcada por su pelea con Morales por el control del Gobierno y el MAS, y por la candidatura de ese partido para las elecciones generales realizadas este año, que ganó el centrista Rodrigo Paz.