La reventa de entradas para el partido entre Bolivia y Colombia ha desencadenado una crisis en El Alto. La situación se ha vuelto caótica, con miles de personas aglomerándose en las inmediaciones del estadio Villa Ingenio para adquirir boletos, que se agotaron rápidamente.
Sin embargo, la alegría inicial se transformó en indignación cuando se descubrió que muchos de estos boletos terminaron en manos de revendedores, quienes elevaron los precios hasta un 900%, de acuerdo con reportes de medios locales.
La Federación Boliviana de Fútbol (FBF) presentó una denuncia penal por los delitos de agiotaje y especulación, para perseguir a quienes se dedican a esta actividad ilícita.
Fotografía aérea del 29 de agosto de 2024 del estadio Municipal de El Alto, nueva sede de la selección boliviana de fútbol en las eliminatorias del Mundial. EFE/ Luis Gandarillas
El comandante departamental de la Policía de La Paz, Édgar Cortez, anunció en una rueda de prensa que se ha iniciado una investigación para identificar a los responsables de estas prácticas. La división de Ciber crimen también está trabajando para detectar a otros estafadores involucrados en la reventa de entradas.
La situación ha obligado a las autoridades a tomar medidas para controlar la reventa y evitar que los aficionados paguen precios exorbitantes por asistir al partido. La Policía ha intensificado sus esfuerzos para mitigar el impacto de estas actividades ilegales, que han empañado lo que debía ser una celebración deportiva para los bolivianos.
El problema de la reventa no es nuevo, pero la magnitud de los precios inflados ha generado una respuesta más contundente por parte de las autoridades. La FBF y la Policía están colaborando estrechamente para garantizar que los responsables sean llevados ante la justicia y para proteger a los aficionados de ser explotados económicamente.
Esto pasa en el cuerpo cuándo se juega en la altura
La selección Colombia jugará por la novena fecha contra Bolivia en El Alto – crédito Andres Felipe Lopez / Cont/VizzorImage /
El Alto, una ciudad situada a 4.150 metros sobre el nivel del mar, se ha convertido en el nuevo escenario para los partidos de la selección de Bolivia en las eliminatorias sudamericanas rumbo al Mundial de 2026. Este cambio de sede, aprobado por la Conmebol, ha generado controversia debido a los desafíos físicos que enfrentan los deportistas al jugar a tal altitud, informó Infobae.
El Estadio Municipal de El Alto reemplaza a La Paz, ubicada a más de 3.600 metros de altura, como el nuevo hogar de la selección boliviana. En su primer encuentro en esta sede, Bolivia venció 4-0 a Venezuela, lo que ha llevado al cuerpo técnico de la selección de Colombia a implementar medidas preventivas para minimizar el impacto del cambio de altitud, ya que se enfrentarán a Bolivia el 10 de octubre.
El médico fisiólogo Henry León, en diálogo con Infobae, explicó que la falta de adaptación a altitudes superiores a 4.000 metros puede afectar a cualquier persona, incluso a atletas de élite. León, quien también es licenciado en Educación Física por la Universidad de La Sabana, detalló que la disminución de oxígeno a estas alturas puede provocar una reducción en la velocidad del pensamiento y otras complicaciones físicas.
La decisión de Conmebol de permitir que Bolivia juegue en El Alto ha sido objeto de críticas, ya que el tema de los efectos de la altitud en los deportistas ha sido un punto de debate recurrente en Sudamérica. En ocasiones anteriores, algunos jugadores han necesitado asistencia con oxígeno durante los partidos en altitudes elevadas.