La denuncia contra El Papirri tiene eco, surgen más relatos

En algo más de 48 horas, la denuncia de estupro que la artista paceña Cristina W.S. publicó en sus redes sociales apuntando a Manuel Monroy Chazarreta, conocido popularmente como El Papirri, se hizo viral, generando más de 3.700 reacciones y 730 comentarios, en los que aparecieron declaraciones que avalan el relato o que revelan otros posibles casos.

De momento el aludido evitó referirse al tema. Aunque sí se presentó el viernes en la noche en un mano a mano con Willy Claure, horas después del posteo.

La fecha de la publicación, 24 de enero, fue elegida intencionalmente. Es el inicio de Las Alasitas en La Paz, una festividad musicalizada por El Papirri desde 1996. Entonces invitó a Wayar de 14 años a grabar los coros.

Aunque en el Código Penal Boliviano vigente las agresiones sexuales a menores prescriben, esta mujer dijo haberse decidido a dar su testimonio porque esa “cancioncita suena a la necesidad imperativa de hablar del estupro, de los mecanismos del poder que siguen vigentes para taparlo (…) de la necesidad de cuidar y respetar a lo tierno y de los muchos significados, ala plena, de Alasita”.

Su relato lo inició recordando cuando tenía 14 años y era “una mujer de Alasita, chiquita”, pero ya tenía interés en el arte, particularmente en la música. El Papirri, tío de una amiga, invitó a ambas a grabar el famoso coro de “Alasita, ala plena, alasita, rebaja casera”. Un año después se convirtió en su profesor en el Conservatorio de Música y, teniendo casi 40 años, habría iniciado una relación con la adolescente de 15.

El padre de Wayar sentó la denuncia ante el Viceministerio de Cultura sin que prosperara. Pero luego de un tiempo la relación se terminó.

Ocho años después, Cristina dijo haberse reencontrado con el cantante nuevamente como su estudiante y él habría intentado besarla, con la diferencia de que en esa ocasión fue ella misma quien lo denunció ante el Conservatorio y el Ministerio de Educación.

“Ese año, Alasita sonó a reivindicación, lucha y fortaleza. También a pena”, escribió.

Denuncia que tuvo eco

Wayar tiene formación en literatura, música y artes escénicas, también fue docente del Conservatorio y entre los centenares de comentarios se puede encontrar el de otras personas del mundo del arte que avalan su relato. Otros lo agravan.

La canción fue lanzada en 1996, cuando ella tenía 14. Al año siguiente habría ocurrido el estupro y a mediados de los 2000 el episodio que derivó en la denuncia, que terminó con el alejamiento de la docencia del maestro.

“Estimada, yo fui tu compañero de clase cuando la asignatura era Historia de la Música Latinoamericana el 2005. Yo tenía apenas 15 y muchos contemporáneos jamás entendimos el porqué de la destitución repentina del profesor”, le escribió un usuario llamado Julio Cesar Moya.

“También fui alumna del profesor Manuel y vi cómo hicieron el reemplazo, tampoco lo entendí, incluso lo vi como una pérdida y pregunté a la secretaria si podíamos hacer algo. Solo decirte gracias por denunciar”, respondió otra exestudiante del Conservatorio.

A otras personas la denuncia no sorprendió tanto.

“Cuando lo entrevisté en su departamento para tomar fotos con su Ekeko, al despedirme, el tipo me besó en la boca. Me quedé asustada y sin saber cómo reaccionar, mientras él y el fotógrafo se reían. No te conozco, pero por supuesto que te creo”, escribió Margarita Palacios. Otras mujeres no publicaron sus casos, pero sí mencionaron conocer a más víctimas.

Se pronunció también una docente del Conservatorio, dando a entender que este tipo de casos ocurrieron más de una vez y con otros maestros, todo con aval de las autoridades.

“Cuando trabajaba en ese Conservatorio me tocó defender con uñas y dientes a mis alumnas y alumnos niños de las garras de pedófilos (…) Recibía a cambio como respuesta de exilustres directores amenazas de meterme a mí a la cárcel por difamación. Felizmente no era difícil demostrar la verdad”, relató Grace Rodríguez.

Y otra mujer llamó a revelar otros hechos que habrían ocurrido en otros centros de formación en arte, como la Academia Man Cesped de Cochabamba.

“No te conozco, pero somos hermanas… hemos vivido cosas parecidas y desde otro Bellas Artes u Man Cesped hemos mirado a nuestros maestros con ojos tristes a corta edad. Gracias por abrir un camino. Ojalá en un futuro podamos sanarnos y decir todos sus nombres, todos”, publicó Angélica Monje.

Este y otros medios específicamente de La Paz trataron de contactar al conocido artista, sin obtener aún una contraparte. Su última aparición pública fue precisamente el viernes 24 en un mano a mano con Willy Claure en el campo ferial Chuquiago Marka en honor a la Alasita del Bicentenario.

Legalidad y sanciones sobre este delito

El Código Penal establece que comete estupro: “Quien mediante seducción o engaño, tuviera acceso carnal con persona de uno y otro sexo mayor de 14 y menor de dieciocho 18 años, será sancionado con privación de libertad de tres a seis años”. Aunque hay agravantes que pueden aumentar la pena. Sin embargo, el delito prescribe a los ocho años si no hay una denuncia.

A propuesta de Comunidad Ciudadana, en el Senado se aprobó el Proyecto de Ley 010/2023-2024. La norma plantea la imprescriptibilidad de delitos sexuales a menores y elimina la figura de estupro para incluir la de violación incestuosa.

Aunque este caso podría no ir a la justicia, voces como la de la diputada Luisa Nayar piden que se aparte al implicado como consejero en la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia.

Fuente: El Pais